7:15 de la mañana, durmiendo a pierna suelta y soñando con algo divertido. De repente noto humedad en mi cara y pienso,… joder que a gustito estoy que babeo y todo. Abro un ojo y sorpresa, la humedad provenía de los lengüetazos que mi querida perra me estaba dando. Había subido las escaleras para despertarme de mi fantástico sueño.
La miro y veo en sus ojos aquella expresión que me dice,… anda macho, levanta y sácame a pasear. Joder, con lo a gusto que yo estaba. Pues nada, me levanto y la saco fuera diciéndole, lo que tengas que hacer, lo haces en el jardín, que ya lo recogeré luego. Así que me vuelvo a la cama, pero ya era inútil. Ya no podía dormirme. Vuelvo a mirar el reloj y veo que ya son las 7:30, así que le digo a la dona,…: a no ser que tengas algo mejor que ofrecerme, me parece que me voy a ir a dar una vuelta con la bici. La respuesta de ella, la esperada,… que te vaya bien, ten cuidado.
Así que me levanto, preparo el bidón con las sales, me visto y hala, a pedalear.
Nada más salir de casa, pienso,….coño que no he desayunado. En fin, ya no hay remedio. Apenas había rodado 200 mts, y me doy cuenta que la rueda delantera está muy baja de aire. Pienso por un momento en volver a casa para inflarla, pero recuerdo que no he cogido las llaves, así que ante la reacción previsible de la dona, cuando la despertara para que me abriera la puerta porque tenía que inflar la rueda,… pues desisto claro, y tiro para adelante con la rueda floja.
En sólo 400 mts, ya estoy en la pista “toboganera” de la ruta del 2º aniversario. Mientras me vestía he pensado que me convendría hacer kms y rodar un poco, así que mi ruta tiene destino la playa del Prat y vuelta a Corbera.
Como lo que me espera más adelante es llaneo y más llaneo, decido serpentear por caminos y trialeras cerca de casa antes de tomar rumbo hacia el río.
Mientras voy pedaleando, voy decidiendo el recorrido. Continúo por la pista y voy a parar a la rotonda de Fontpineda. En ella, me llevo un primer susto. Un simpático conductor, decide que la rotonda es suya y que su coche debe pasar primero, a pesar de que yo ya estaba en medio de ella. Pues nada, freno de golpe y dudo un momento entre llamarlo por su nombre o acordarme de su santa madre. Al final, decido aplaudirle y desearle buen viaje. Acabo de empezar la ruta, y no es cuestión de amargarse la mañana.
Subo hacia el repetidor de Pallejà, donde hago una paradita para auto fotografiarme, y sigo camino bajando por el sendero estrecho que me lleva hacia Pallejà.
Una vez en el río, me digo a mí mismo, venga…. que la playa está cerca. Voy avanzando y algunos bikers se cruzan conmigo. La mayoría no saluda, hay que ser capullo
. En fin, yo a lo mío. En el sentido en que yo pedaleo, no voy viendo ningún biker, cosa que me extraña un poco, por el contrario, unos metros más adelante, veo una cabellera rubia platino, con unas mallas fucsia apretaditas, que va haciendo running.
Joder, vaya, si esto sigue así, al menos no me voy a aburrir. Cuando le doy alcance, la miro a la cara, y llevaba unas gafas de sol de pasta blanca que le tapaban media cara. Joder,… pero si es la lady Gaga
. XD, si se viste y adorna así para correr, que hará cuando salga de fiesta.
En fin, yo a lo mío, a pedalear. A mitad de camino entre Santvi y Sant Boi, la bike me hace algo más que un extraño, y compruebo que la rueda delantera, está prácticamente sin aire, así que tengo que parar para tratar de inflarla. Miro la mini bomba que llevo, la cual me vendió un mamón que todos conocemos
, y me pongo a temblar. Tras unos minutos, consigo inflarla, y por suerte me ha aguantado toda la ruta. No quisiera pinchar yendo sólo, más que nada por la habilidad que tengo reparando pinchazos, algunos ya la conocéis, verdad?
Sigo mi camino, y por fin, a lo lejos veo dos bikers que pedalean en sentido playa, los miro, y pienso,… ¿por qué no?, así que, como diría el amigo AC/DC, “rock and roll”, y a por ellos.
Cuando los alcanzo, los miro, y veo que son dos chavales, que no pasarían de los 30, y con buenas máquinas, así que, aflojo un poco y les saludo amablemente por si acaso, no vaya a ser que todavía me den un repaso.
Desde ahí hasta la playa, poca historia. Llego a la playa, me hago la fotografía de rigor, y la cuelgo en el “face” para que algún capullo haga su comentario gracioso,
.
Sin más dilación, le doy la vuelta a la bike, y me pongo en marcha. En el camino, paro para llenar el bidón de agua, porque hoy el sol era de justicia, y ya estaba seco. Tardo al menos 10 minutos en llenar el bidón, porque las putas sales monodosis, no hay quien las abra, joder
.
Una vez ya en la pista del río, veo a un biker, que va a buen ritmo, pero al que decido dar alcance, ya que si no,… me aburro. Cuando estaba pasándolo, juro que iba a saludarlo, pero el mamón giró la cabeza hacia el río, como el que va sobrao y no malgasta saliva en saludar. Así que no le saludé. Cuando le pasé, noté que su bike hacia un ruidillo, ñigo-ñigo-ñigo, y pensé échale aceite mamón
.
Sigo pedaleando, y a los pocos segundos, vuelvo a oír el ñigo-ñigo-ñigo, y pienso para mí, será mamón,…lo tengo detrás
.
Bajo un piñón más, y voy a una velocidad de unos 27 – 28 kms/h, pero el ñigo-ñigo-ñigo, sigue ahí. ¡Qué cabrón!
Miro hacia el suelo, y veo la sombra de otra cabeza a la altura de mi rueda trasera. Joder, me ha cogido la rueda. Yo sigo a lo mío, haciendo ver que no me doy cuenta, o que no me importa, pero a los pocos minutos, la sombra de la puta cabeza, la veo por la izquierda, y a la altura de mi sillín. Eso sí que no, ¿pasarme?,… ni de coña
. Pongo todo lo que tengo, y aprieto aún más. El tipo, trata de aguantar el tirón, pero por fin, a la altura del puente del español, lo dejo atrás y sigo a mi rollo.
Más adelante, encontré otro objetivo, al que pasé y saludé, y que después me siguió a unos metros de distancia, hasta que llegamos a Pallejà. Aquí ya no podía esforzarme en dejarlo atrás, porque mi cabeza ya estaba pensando en lo que me esperaba,…la subida por carretera a Fontpineda,… bufff
.
Eran ya las 11:00 h., cuando inicio la subida a Fontpineda. El sol, me estaba machacando, y creía que no lo conseguiría. Mis piernas decían,….¡para!, ¡para!, ¡para!, pero mi cabeza decía, ¡sigue!, ¡sigue!, ¡sigue!.
De vez en cuando, pensaba, joder párate, si nadie se va a enterar, si vas sólo ¡desgraciao!, pero, el que sí lo sabría, sería yo, y eso era más que suficiente.
Aunque me costó Dios y ayuda, esta vez, mi cabeza pudo con mis piernas, y no paré en ningún momento, ni en la subida a Fontpineda, ni en la subida de La Cova, ni en el par de repechones que me quedaban para llegar a casa.
Al final, el esfuerzo ha merecido la pena,…: 64,5 kms, / 18 kms/h de media, y un desnivel acumulado (según el gps) de 595 mts, aunque creo que es algo más. Sé que esto no es nada comparado con lo del otro día en Montserrat, del cuarteto “rockero”, pero es lo que hay
.
En breve más.
Un saludo “companys”.